Diseño de casas pasivas y de bajo consumo energético

Las casas pasivas se caracterizan sobre todo por ser especialmente económicas en el consumo de calor. Una casa pasiva es una vivienda con un aislamiento térmico tan eficaz que apenas libera calor al ambiente, por lo que basta con un pequeño sistema de calefacción o incluso se puede prescindir de él. La razón es el uso de las llamadas "fuentes de energía pasivas", como el calor solar o el calor residual de los aparatos electrónicos.

En Alemania, el término casa pasiva no es una marca protegida, sino un concepto de uso libre. No obstante, el instituto independiente Passive House Institute ofrece certificaciones para la determinación como "casa pasiva cualificada".

La instalación de un sistema fotovoltaico puede ayudar a reducir la necesidad de fuentes de energía convencionales. Un sistema de ventilación controlada también es esencial en una casa pasiva para mantener la pérdida de calor lo más baja posible y proporcionar aire fresco al interior. 

Una opción para los inmuebles existentes es la renovación energética. Esto siempre va asociado a costes elevados, por lo que los propietarios suelen evitarlo. Sin embargo, especialmente en tiempos de aumento de los costes energéticos, una medida de este tipo puede ahorrar considerables gastos de calefacción y también aumentar el valor de mercado de la propiedad.