Hormigón textil: sustitución del acero

El hormigón textil es un nuevo material compuesto que consta de hormigón, por un lado, y un componente textil, por otro. Una gran ventaja es que estos elementos textiles en el componente pueden lograr un mayor rendimiento en términos de elementos estructurales-mecánicos, como la carga de tracción, con un menor peso. Estos elementos textiles se añaden al hormigón en forma de rejillas personalizadas y revestidas.

Estos nuevos tejidos sustituirán a los refuerzos de acero existentes hasta ahora. Éstas son mucho más susceptibles a la corrosión. La mejora de la resistencia a la tracción ya mencionada también significa que hay que utilizar menos hormigón y que los componentes son más esbeltos y fáciles de construir gracias a su menor peso.

Existen diversas variantes de hormigón textil, como el vidrio resistente a los álcalis, el basalto y el carbono. El hormigón textil de vidrio resistente a los álcalis, por ejemplo, ofrece una mayor protección contra el fuego. Un material de construcción de futuro es el hormigón textil con elementos de carbono. El carbono proporciona una gran resistencia, no hay riesgo de corrosión y se caracteriza por una buena durabilidad. Una desventaja, sin embargo, es que el carbono es bastante más caro que otros tipos de hormigón textil.